Crónica UD Melilla 0-4 Real Madrid | Dieciseisavos de Copa del Rey

Gran partido de Vinicius, que se reivindicó ante Solari | UD Melilla 0-4 Real Madrid

UD Melilla 0-4 Real Madrid: “El día en que Vinicius dejó de cocer”

El Real Madrid ha cerrado con calma y sin mucho esfuerzo su pase a la siguiente fase de la Copa del Rey, en el primer partido de la era post-Lopetegui, bajo un aguacero importante y ante un voluntarioso equipo, la UD Melilla, que sólo pudo oponer algo de resistencia en los primeros 15 minutos de cada equipo.

Un partido que supuso una especie de reivindicación para dos de los grandes damnificados del periplo de Lopetegui en el banquillo blanco, como son Alvaro Odriozola y, sobre todo, Vinicius, que firmaron un gran partido, como estiletes del equipo por sus bandas.

Había mucha expectación por saber si Santiago Solari iba a dejar su primera impronta en el sistema de juego, apostando por su conocido 4-2-3-1 del Castilla o si habría continuidad en el 4-4-2 o el 4-3-3 del cesado Lopetegui, así como si daría minutos no sólo a los menos habituales sino también a alguno de sus chavales del filial, empezando por Vinicius.

Aunque el campo no estaba para florituras y además, con el equipo en cuadro debido a las lesiones (Carvajal, Vallejo, Marcelo, Mariano y Varane) pronto se vio que Solari iba a apostar por la solidez y por un esquema más compacto.

Pirmer “once” de Santiago Solari como entrenador del Real Madrid | UD Melilla 0-4 Real Madrid

Con Navas bajo los palos, Odriozola volvía al equipo titular tras el fiasco de Barcelona, acompañado de Ramos y el chaval Javi Sánchez y Reguilón en la defensa, un doble pivote integrado por Marcos Llorente y Ceballos, una línea de tres integrada por Lucas Vázquez por la derecha, Vinicius por la izquierda y Asensio, con libertad de movimientos por el ataque, y Benzema en punta.

Aunque los primeros 15 minutos el Melilla ofreció algo de resistencia, intentando imponer su juego bajo un chaparrón torrencial, lo cierto es que puso más voluntad que fútbol y en cuanto el Madrid se asentó en el campo, el partido se convirtió en un monólogo de los de Solari, que dominaron a placer, con constantes entradas por ambas bandas

De hecho, el partido -y la eliminatoria- pudo y debió quedar finiquitada mucho antes pero el desacierto rematador de Lucas, que gozó de tres buenas oportunidades para marcar y, por qué no decirlo, la gran actuación de Barrio, el meta local.

La primera de ellas fue un espectacular trallazo del delantero gallego desde fuera del área en el minuto 22, que obligó a Barrio a lucirse con una no menos espectacular mano arriba. Quien no falló fue Benzema, seis minutos más tarde, quien anotó en boca de gol como colofón a una veloíima internada de Odriozola por la derecha.

La segunda, minutos más tarde cuando se plantó solo ante Barrio pero se le hizo de noche de repente y, tras intentar regatear al meta se ofuscó y dejó escapar el segundo de la noche. La tercera y última cuando, tras un gran pase entre líneas de Ceballos, disparó “al muñeco” en el mano a mano con el meta de Melilla.

Lucas Vázquez no estuvo fino de cara al marco rival | UD Melilla 0-4 Real Madrid

Entre medias, Vinicius empezó el recital con un despliegue de verticalidad, velocidad y fútbol directo por su banda que culminó en el descuento de la primera parte con un excepcional pase con el exterior al centro del área. Ahí apareció Asensio que remató de primeras al fondo de la red para asegurar el partido.

La segunda parte, con el campo en un estado lamentable y con la eliminatoria resuelta, Solari no quiso sorpresas en forma de más lesiones y optó por darle descanso a Benzema y Ramos, por Fede Valverde y Nacho y reforzar el centro del campo, dando más libertad a Ceballos.

Como en la primera mitad, apenas un cuarto de hora le duró la gasolina al voluntarioso equipo local, que intentó tocar la pelota y llevar algo de peligro e incluso mereció algo más. Hasta que la sala de máquinas del Real Madrid y, en especial, Vinicius y Odriozola, como puñales por las bandas decidieron acabar por la vía rápida.

Precisamente Vinicius protagonizó la jugada del partido, con un espectacular disparo al larguero que acabó botando a escasos centimetros de la línea de gol, así como una brutal arrancada al más puro estilo Bale que no acabó en gol porque el brasileño acabó complicándose la vida más de la cuena.

En el minuto 78 llegó la sentencia definitiva en una larga y embarullada jugada del ataque blanco, hoy de rojo. De nuevo una gran asistencia de Odriozola por la derecha que remachó Asensio desde el punto de penalti y cuyo disparó repelió Barrio en una gran parada. El rechace le cayó a Vinicius en la parte izquierda del área, quien cedió de tacón a Reguilón que le doblaba por su banda.

El canterano lanzó un centro-chut que remató Vinicius y el balón muerto, prácticamente en la línea, fue empujado a gol por Odriozola, culminando un magnífico partido.

Odriozola culminó con un gol su gran partido | UD Melilla 0-4 Real Madrid

En ese momento, Solari hizo debutar al joven canterano canario Cristo González que no pudo empezar con mejor pie ya que, con el tiempo prácticamente vencido, cabeceó a gol un nuevo gran pase de Odriozola desde la derecha.

Y así, sin tiempo apenas de que el joven Cristo pudiese siquiera celebrar su gol, el inefable De Burgos Bengoechea decidió aliviar el suplicio para el equipo local y sus espectadores, absolutamente empapados bajo un tremendo aguacero, que se había reactivado unos minutos antes y decretó el final del partido.

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