Iker Casillas Iscariote y la Selección

Con sorpresa y muchísimo desagrado he asistido al nuevo proceso de evangelización de Iker Casillas, un personaje que yo consideraba amortizado a todos los niveles, especialmente en el deportivo pero también en el institucional.

De Gea, sorprendente “pimpampum” en este parón

Sinceramente, confieso que yo pensaba que la prensa estaría bastante ocupada estos días buscando algo con lo que ensuciar la imagen de Gareth Bale o de su nuevo juguete, el brasileño Vinicius, aprovechando el parón de selecciones.

Un período en el que, dicho sea de  paso, Prensa Nostra, lejos de mostrar el más mínimo interés por “el equipo de todos”, suele aprovechar para reforzar, aún más si cabe, sus ataques al Real Madrid y se inventan fichajes o avivan eso que llaman “incendios”, enfrentando a sus jugadores, especialmente los españoles, con los extranjeros de la plantilla.

Sin embargo, hay que reconocer que en esta ocasión y, dado que salvo el viaje de Bale a Armenia (lo único reseñable para que Relaño tratase de volver a hacer sangre con el galés) y alguna que otra bromita de pésimo gusto de la gente de El Partidazo de COPE sobre Vinicius, la pieza de “caza mayor” de este período ha sido David De Gea, esoecialmente tras el último batacazo de España.

Partimos de la base que el portero madrileño del Manchester United, es un tipo poco dado a dar entrevistas y bastante alejado de los medios españoles, especialmente a cuenta del tristemente famoso “Caso Torbe” en el que de forma gratuita le implicaron en un escándalo sexual con menores.

Y ya sabemos cómo se las gasta Prensa Nostra con aquellos que se muestran “receptivos” con ellos. Su máxima es “si no nos das, qué quieres que te demos nosotros”. Por tanto, De Gea no es precisamente santo de su devoción.

Eso se nota, sobre todo porque, además, De Gea fue quien quitó del primer plano de la actualidad, al menos en la Selección, a su adorado Iker Casillas, el mayor filtrador de noticias y alineaciones a la prensa que recuerdan los tiempos.

El maltrato que está recibiendo el meta del United es sencillamente indecente, especialmente desde el pasado Mundial de Rusia. Es cierto que el chico no atraviesa su mejor momento pero en modo alguno ni fue el culpable  del ridículo de España en dicho campeonato ni en la no clasificación para la FInal Four de ese nuevo torneo que es la UEFA Nations Cup.

Sin embargo, da la sensación que muchos periodistas, especialmente los del Club de Fans de Iker Casillas, estaban esperando este momento para pasarle al cobro a De Gea todas las facturas que tenían guardadas en el cajón.

Y sólo por haber cometido el delito de quitar de la titularidad a su niño bonito, una titularidad que, según estos mismos pájaros, era propiedad del Santo de Móstoles y le pertenecía por derecho propio.

El enésimo ejercicio de ruindad de Iker Casillas

Pues bien, de la mano de esta gente, y tras varios años en el ostracismo, entre otras cosas debido a su lamentable estado de forma, Casillas no ha perdido la ocasión de volver a mostrar su lado más ruin, ventajista y miserable.

En vez de salir a defender a su ex-compañero en la Selección y pedir respeto para De Gea, apenas le faltó tiempo para salir de su cueva portuguesa, de la que nunca debió salir tras su marcha del Real Madrid, y postularse para volver al combinado nacional. Y por supuesto, y a ser posible, como titular, que ya sabemos cómo se las gasta el de Móstoles con los entrenadores que, por el motivo que sea, le dejan en el banquillo…

En un ejercicio de ruindad, marca de la casa, y como ya hizo en tiempos de Mourinho o Ancelotti Casillas no dudó en poner a trabajar a su particular “Brunete mediática” (esto es, Cuatro, As, COPE, SER, Onda Cero o Marca) y sus cabecillas Julio Pulido, Manu Carreño, Manolo Lama, Antón Meana, Fernando Burgos, David Alonso y demás “hermanos mártires” de la causa casillista, no tardaron en ponerse manos a la obra.

Además de redoblar sus ataques a De Gea en todos los programas y medios deportivos (la indecente retransmisión del segundo gol de Croacia durante el Croacia-España del pasado jueves a cargo de Manolo Lama es la mejor prueba de ello) se empezó a aventar la idea de repescar a Casillas para la Selección y se comenzaron a publicar encuestras en Internet sobre si Luis Enrique debía recuperar al mostoleño o no.

Y en paralelo, Casillas volvió a la palestra para recordar tiempos olvidados y, como tanto les gusta a sus amigos de Prensa Nostra, sacó el manido tema de los Real Madrid-Barça de la era Mourinho y Guardiola para entonar el mea culpa y ponerse, como ya hizo en su momento, del lado del Barça.

Temas tan casposos como el señorío del Madrid (por supuesto el que exige la prensa al Madridismo, que es el de poner siempre la otra mejilla y no protestar nunca aunque te pisen el callo) o una falsa polémica España vs. Cataluña, ahora tan de moda pero que, en absoluto, lo estaba entonces. Casillas mostró, en general, su lado más viscoso para ganarse el favor de sus medios afines y volver al primer plano de la actualidad.

Sin embargo, y como ya hizo con su compañero Diego López cuando éste le desplazó de la titularidad tanto con Mourinho como con Ancelotti, en esa entrevista no se le pudo oir ni una sola palabra de aliento para con De Gea, quien debido a este recrudecimiento en las críticas por parte de sus amigos periodistas, no lo está pasando precisamente bien.

Sin mostrar más interés que volver al puesto que un no tan lejano día perdió (en mi opinión , demasiado tarde), Casillas no fue capaz de mostrar el más mínimo atisbo de solidaridad con su compañero, demostrando que él es el primer casillista del mundo, además de volver a hacer gala de una catadura moral, cuando menos, manifiestamente mejorable.

Luis Enrique y las presiones

Quiero creer en la independencia de Luis Enrique y que no ceda a la presión de los mamporreros del ex-portero madridista y, a pesar de estas encuestas -cuyo valor científico es más que discutible- y ese falso debate que, según ellos, “está en la calle”, y por nada del mundo caiga en la tentación de traerle, ni siquiera para probar o darle un partido-homenaje como el que sí se le dio, años después de su salida del equipo nacional, a David Villa.

Si el técnico asturiano desea conservar su puesto, más le vale que no le llame porque si no, puede acabar mal.

Entre otras cosas porque, como dije antes, si algo caracteriza al de Móstoles, es que desde siempre fue implacable con los entrenadores que no le ponen de titular y jamás se paró en barras para lograr su objetivo, que es la titularidad perpetua, por más años que pasen y por muy mal que se encuentre.

Porque Casillas no acepta la suplencia. Nunca. De ninguna manera y no dudará en masacrar a Luis Enrique aun cuando éste cometa la torpeza de llamarle de vuelta a la Selección pero ose dejarle en el banquillo.

Que no dude el asturiano que Casillas hará lo que hizo en otros casos, que es tirar de su guardia pretoriana en la prensa y comenzarán una campaña de acoso y derribo para machacale sin piedad hasta que ceda.

Que le pregunten si no a Mourinho a Ancelotti, que lo sufrieron en sus propias carnes y en el caso del técnico italiano, cómo acabó por ceder ante esas presiones, con el Real Madrid hundido y sin títulos, en parte a las pésimas actuaciones de Casillas, y con él mismo fuera del equipo.

Es más, ni siquiera el adorado Marqués, al que como confesó el propio Casillas, nunca perdonó que le “limpiase” de la titularid del Real Madrid en 2002 en favor de César y que, a pesar de estar haciendo el ridículo en Oporto, le siguió convocando pero no le dio la titularidad en la Eurocopa de Francia en 2016. Y todos sabemos cómo acabó la cosa.

2 comentarios en «Iker Casillas Iscariote y la Selección»

  1. Que vergüenza de artículo, cuanto daño nos hizo Mouriño a los madridistas… tratar así a un hombre que llegó con 9 años al Real Madrid, madre mia… que asco.

    1. Casillas fue el primero en ponerse a los pies de los caballos, demostrando ser:
      1º) Un pésimo capitán, vendiéndose a las hordas culés a cambio de ser perdonado por estos en la Selección, que era lo que realmente le importaba
      2º) Un pésimo compañero, porque en aras de seguir jugando de titular permitió que se insultara gravemente a Diego López o Arbeloa por sus amigos de la prensa
      3º) Un pésimo profesional, porque él mismo admitió que no se entrenaba porque tenía un “talento innato” y “no le venía bien”. El resultado pudo verse fácilmente en sus últimos años, arrastrándose por el campo.

      Podría seguir pero para eso está el artículo. Lamento que no te guste pero a mi no me gusta Casillas
      Un saludo

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