El presidente de la FIFA, Gianni Infantino,ha aprovechado la reunión de su Consejo Directivo, celebrada hoy en Miami, para dar luz verde a un ambicioso proyecto que supone la creación de un Mundial de Clubes de 24 equipos, a imagen y semejanza del Mundial de naciones.
La llegada de este nuevo campeonato, que se celebraría cada cuatro años a partir del año 2021, supondrá la desaparición de la actual Copa Confederaciones (CONFECUP) y se disputaría desde mediados de junio hasta principios de julio, aprovechando para su celebración el hueco previsto en el calendario internacional actualmente.
Asimismo, se ha conocido que este nuevo torneo se disputaría inicialmente en Asia, en un país aún por determinar, aunque todo apunta a que sería Japón. Entre otras cosas porque su organización contaría con el respaldo económico de Softbank Group, el gigante nipón de las telecomunicaciones.
La citada compañía ha apostado fortísimo por la celebración del torneo, para lo cual ha puesto encima de la mesa la nada despreciable cifra de 15.000 millones de euros, que cubrirían la organización de las tres primeras ediciones.
Por último, decir que la proporción de equipos por Confederación se haría de la siguiente manera:
- Ocho equipos de la UEFA, encabezados por los campeones de la Champions League y la Europa League
- Seis de la CONMEBOL, encabezados por el campeón de la Copa Libertadores.
- Tres de la CONCACAF, encabezados por el campeón de la Liga de Campeones centro y norteamericana
- Tres de la CAF, encabezados por el campeón de la Liga de Campeones de Africa.
- Tres de la AFC, encabezados por el campeón de la Liga de Campeones asiática
- Uno de la OFC, inicialmente el ganador de la Liga de Campeones de Oceanía.
La UEFA y la ECA, radicalmente en contra
A pesar de lo atractivo de la idea, la propuesta de Infantino se ha encontrado de primeras con la oposición de la Asociación de Clubes Europeos (ECA). Dicho organismo mostró su disconformidad a través de una carta, en la que quiso dejar claro que ninguno de sus 232 miembros tomaría parte en este nuevo campeonato.
Asimismo, la UEFA, que no ve con buenos ojos que la FIFA pueda conseguir pingües beneficios, gracias a la presencia mayoritaria de los clubes europeos en dicho torneo, también se ha mostrado contraria a la celebración de este nuevo Mundial de Clubes.
Una oposición que, si nos basamos en sus declaraciones al respecto, parece importarle poco a Infantino, quien se muestra partidario de jugar el campeonato, le pese a quien le pese, aunque se ha mostrado partidario del diálogo para llegar a una solución negociada.
Una solución que bien podría venir dada por un aumento en el reparto de dinero a los participantes. Las cifras que, desde luego se están empezando a poner encima de la mesa son, cuando menos interesantes y podrían ayudar a acercar las posturas definitivamente.
En concreto, las primeras cantidades de las que se está hablando irían desde los 20 a 30 millones de euros sólo por tomar parte en el torneo, hasta los 120 que podría llevarse el ganador, pasando por los 80 de los cuartofinalistas.
“Todos los grandes equipos van a participar. Vamos a seguir debatiendo pero la visión de la FIFA es incluir a todos y nuestra responsabilidad hoy era tomar una decisión”, afirmó Infantino sobre la oposición de la ECA.
“Respeto las posiciones de todo el mundo, pero estoy seguro de que al final, clubes, ligas, jugadores y asociaciones estarán muy satisfechos. Esta competición tendrá un impacto positivo en el calendario internacional ya que ocupará un espacio que ya estaba reservado para jugar”, refiriéndose al que ya estaba previsto para la disputa de la casi segura extinta CONFECUP.
