Se abrió el melón de Luis Enrique

Luis Enrique entra en cada rueda de prensa del club que le paga de modo desafiante, con cara de producirle un inmenso e intenso asco todos los periodistas que allí están, a continuación despacha las preguntas con un desdén y una soberbia que denotan una personalidad egocéntrica, maleducada y prepotente.

Luis Enrique
Luis Enrique | Rueda de Prensa

 

Por lo general no contesta nada más que vaguedades sin sentido como si estuviera amodorrado y pensando; “pero que idiotas son estos chupatintas”. En cuanto a los periodistas a los que ha cogido manía ( y van unos cuantos), a esos, les veta, ni siquiera les contesta sus preguntas o, si lo hace, es para humillarles o directamente reírse de ellos en su cara.

Lo mas curioso, sin embargo, es que a este individuo le recibieron, como suele ser habitual en el club y ambiente en el que trabaja, de rodillas, ni una mala crítica y eso que ese vestuario, como todo vestuario de equipo grande, tiene que tener grandes y jugosos cotilleos en los que nuestra prensa patria suele chapotear como pez en el agua.

¿Y si este sujeto entrenase al Madrid? Pues si eso hubiese sucedido ahora mismo estaría en el paro. Para empezar le hubiesen dado palos ya desde la primera pretemporada, cualquier chorrada se hubiese convertido en “casus belli” y los enfrentamientos probablemente hubiesen transcendido del nivel futbolístico para pasar al personal.

Este remedo de entrenador, que sobrevive del talento de sus estrellas y en especial de Messi, al que no para de hacer la pelota descaradamente, al que se somete babosamente y que no ha aportado nada en conocimiento, estrategia y método alguno al oficio de director técnico de un equipo de fútbol, ayer se despacho con una de sus habituales chorradas de macarrilla de bar de extrarradio, vino a decir que Messi es el único Balón de Oro y que todos los demás detentadores de ese galardón, pasados, presentes y futuros tenían, en comparación, un Melón de Oro.

El problema de todo esto es la doble vara de medir. Mientras a Mourinho la prensa le recibió con el cuchillo entre los dientes, le insulto hasta en temas personales y no le pasó ni una, a este semoviente con nombre de tonto de pueblo le permiten todo tipo de tropelías, menosprecios y salidas de tono.

Pero así están las cosas, el Real Madrid tiene que competir contra todo, por eso es el mejor club del mundo, casi siempre tiene que torear con una prensa hostil, contra la envidia de los perdedores y, a veces, contra entrenadores rivales que son unos melones.

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