Crónica Real Madrid 5-0 Sevilla | Jornada 15 Liga Santander

Cristiano Ronaldo, festejando su segundo gol al Sevilla | Real Madrid 5-0 Sevilla

Real Madrid 5-0 Sevilla: “Una ‘manita’ de esperanza”

El Real Madrid ha firmado no sólo la mejor y más contundente victoria de esta Liga sino también los mejores minutos de toda la temporada ante el Sevilla, uno de los rivales más duros que le quedaban hasta el parón navideño.

Los primeros minutos han sido un ejercicio de presión, movilidad de balón, de precisión por las bandas y sobre todo ha sido capaz de recuperar la velocidad y el desborde infernales que han sido siempre el santo y seña del juego de este club.

Un partido que no se presentaba en absoluto fácil a priori, habida cuenta la cantidad de bajas con las que Zidane afrontaba el encuentro, con una defensa prácticamente en cuadro hasta el punto que tuvo que tirar del recién recuperado Vallejo a última hora para completar la zaga.

Pero lo más importante fue la disposición táctica, con una presión furibunda y una verticalidad que no se recordaba en el Bernabéu. Y, sobre todo, con una precisión de relojero suizo en la finalización que consiguió que los primeros 45 minutos hayan sido un compendio de lo que es y ha sido -y será por más que se empeñen muchos- la verdadera esencia del fútbol blanco.

Cristiano ofreció su quinto Balón de Oro al público del Bernabéu | Real Madrid 5-0 Sevilla

En definitiva, una magnífica y necesaria victoria que le permite afrontar su nuevo e inminente compromiso esta misma semana en el Mundial de Clubes con el máximo optimismo.

Los de Zidane disputarán este miércoles las semifinales del citado torneo ante el Al Jazira de Abu Dhabi. Un partido que, en caso de ganar, le enfrentará el sábado al vencedor del encuentro que medirá el martes al Pachuca mexicano y al Gremio brasileño.

Por último, decir que el partido devolvió el protagonismo a un Cristiano Ronaldo en horas bajas en la Liga. No sólo porque presentó ante el Madridismo su flamante y merecido quinto Balón de Oro sino porque, además, el portugués recuperó su olfato goleador y se le vio más fresco y participativo que nunca.

Un vendaval de juego, velocidad y pegada en la primera parte

El partido comenzó con una nueva y sorprendente revolución, como dije anteriormente, obligada por las circunstancias. Sin Carvajal ni Ramos ni Casemiro por sanción y sin Varane por lesión, el Madrid volvió a optar por el 4-3-3 que tan buen resultado le dio este miércoles ante el Borussia Dortmund.

Así pues, Zidane formó una defensa inédita con Achraf, Vallejo, Nacho y Marcelo y la recuperación para la causa de la pareja Kroos-Modric, con el croata haciendo de Casemiro y con Lucas y Asensio tirados en las bandas, con Benzema y CR7 en punta.

El Madrid saltó al campo con la sana intención de acabar por la vía rápida con el fútbol del Sevilla, por lo que, con buen criterio, asfixió la salida de balón del equipo de Marcucci con una elevadísima presión así como una circulación de balón eléctrica.

De ahí que no tardase ni un minuto en dar el primer susto, cuando una gran jugada de Asensio fue finalizada por Lucas Vázquez desde la frontal del área, obligando a Sergio Rico a realizar una gran intervención mandando el balón a córner.

Precisamente, de ese córner botado por Kroos surgió el primer gol del Madrid ya que, el balón dirigido al segundo palo provocó un mal entendimiento entre Kjaer y Muriel y un mal despeje que le cayó a Nacho, quien sólo tuvo que empujarla dentro de la meta de Rico.

Momento en el que Nacho anota el primer gol de la tarde | Real Madrid 5-0 Sevilla

El Madrid intentó dar un segundo zarpazo por medio de un disparo lejano de Ronaldo en el minuto 10 que se fue a córner en una nueva buena intervención del meta sevillista.

Sin embargo, desde ese momento todo el empuje y la presión que habíamos visto en estos primeros minutos comenzaron a diluirse, bien porque el Madrid sabedor de que era imposible mantener ese ritmo infernal decidió dar un paso atrás, bien porque el Sevilla -que no es cuarto en la Liga por casualidad- empezó a desplegar su fútbol.

El caso es que los de Marcucci se empezaron a sentir más cómodos y Banega, la principal fábrica de fútbol sevillista, empezó a tocar con comodidad y a mover la pelota con criterio. Eso les permitió acercarse a la meta de Navas con facilidad pero sin llegar a crear nada de peligro, salvo en un disparo lejano de Pizarro que se marchó rozando el poste izquierdo del meta “tico”.

Entre otras cosas, el Sevilla no pudo hacer más daño porque se encontró a un Achraf muy atento y a unos segurísimos Vallejo y Nacho, que cortaban de raíz cualquier acercamiento con riesgos.

Pero a diferencia de otras ocasiones en las que hasta que el rival no marcaba los de Zidane no espabilaban, en esta oportunidad sólo le duró apenas 10 minutos el dominio de la pelota al Sevilla. Con un centro del campo estelar, el balón empezó a moverse con electricidad y Modric y, sobre todo, Kroos y Asensio se dedicaron a buscar los huecos con una facilidad y una velocidad pasmosas.

A punto de cumplirse el minuto 20 Asensio se la puso a Benzema pero su remate de cabeza se marchó fuera por poco.

Y de nuevo fue Asensio el protagonista de la jugada que dio lugar al segundo gol blanco, cuando apenas cuatro minutos después, en una conducción rapidísima vio un hueco en la derecha que aprovechó para fitrar un pase al único hueco libre que había dejado la defensa del Sevilla.

De ahí emergió un no menos rápido Cristiano Ronaldo, quien tras ganarle la espalda a Pizarro, batió por bajo a Rico en su salida.

CR7 ejecutó el penalti que dio lugar al tercer tanto | Real Madrid 5-0 Sevilla

En pleno éxtasis de fútbol blanco, al filo de la media hora Kroos pudo batir a Rico pero su disparo se marchó alto e instantes después, se reclamó una caída de Cristiano Ronaldo en el área como penalti pero Martínez Munuera no quiso ver nada y decretó saque de puerta a pesar de las protestas del luso.

Donde si vio penalti el colegiado valenciano cuando, apenas un minuto después, Jesús Navas cortó claramente con la mano un intento de pase de Marcelo. El lanzamiento desde el punto fatídico lo ejecutó Cristiano Ronaldo, aunque no sin ciertas dificultades puesto que su lanzamiento, duro y pegado al palo,a punto estuvo de ser rechazado por Rico.

Que cayera el cuarto era cuestión de tiempo y a punto estuvo de llegar en el minuto 34 cuando una nueva incursión de Lucas Vázquez, un verdadero puñal por su banda durante todo el partido, culminó con un magnífico centro al corazón del área rematado en una espectacular chilena pero el balón fue rechazado por Sergio Rico con una gran parada.

Con el Madrid desatado sobre la meta sevillista, por fin, cayó el tercero. En el minuto 38, la presión de Cristiano Ronaldo en el centro del campo dio lugar a un robo de balón y a trenzar una vertiginosa pared entre el propio Ronaldo, Toni Kroos y Lucas Vázquez.

El gallego vio perfectamente la llegada completamente solo del centrocampista alemán y le devolvió la pelota para que marcase a placer desde el punto de penalti.

Con el Sevilla completamente groggy e incapaz de dar tres pases seguidos, entre otras cosas, por la gran presión de todo el equipo, empezando por Cristiano Ronaldo y Benzema, llegó el cuarto tan solo tres minutos después.

Una fabulosa pared entre Karim Benzema y Cristiano le permitió al francés ver la llegada en carrera de Achraf por su banda y el lateral marroquí aprovechó la diagonal para cruzar el balón lejos de las manos de Sergio Rico.

Una segunda parte muy tranquila

La segunda parte, ya con todo el pescado vendido, nos permitió ver una versión más relajada del Madrid lo que se tradujo en que el Sevilla pudo tocar con más comodidad la pelota.

De hecho, el dominio de los de Zidane había sido tal que la primera vez que Navas tuvo que emplearse mínimamente para detener un lanzamiento de un sevillista fue en el minuto 50, cuando el costarricense atajó sin problemas un disparo de Nolito. Lo mismo que ocurrió un par de minutos más tarde con otra ocasión similar de Muriel, que también desbarató Navas sin problemas.

Achraf superando a Sergio Rico en el quinto gol | Real Madrid 5-0 Sevilla

A todo esto, el Madrid decidió cambiar el fútbol vertiginoso y vertical de la primera mitad por otra versión más tranquila y controlar más la pelota. Para eso dio entrada a Marcos Llorente y Ceballos, que entraron por Kroos y Modric, respectivamente, y el número de ocasiones descendió notablemente.

Precisamente el croata, un par de minutos antes de ser sustituido, dio el gran susto cuando sufrió una durísima entrada de Muriel por detrás que le dejó bastante dolorido y cojeando durante unos instantes, aunque afortunadamente no pasó a mayores.

En el minuto 66 se produjo la mejor jugada de ataque del Real Madrid de toda la segunda mitad cuando, precisamente, ese fútbol más de toque y control que había propuesto Zidane en este período nos dejó una magnífica jugada de ataque culminada por un gran centro de Marcelo que Benzema cabeceó a la base del poste de Sergio Rico.

Ya con Isco en el campo, que había entrado en el minuto 70 por un ovacionadísimo Cristiano Ronaldo, el Madrid perdió casi toda la mordiente que le quedaba en esta segunda parte y, aunque lo intentó a base de toque, lo cierto es que ya no volvió a disparar entre los tres palos del Sevilla.

Todo lo más destacable que ocurrió fue un intento de volea de Marcos Llorente desde fuera del área tras un gran centro desde la izquierda de Marco Asensio pero el balón, mordido y sin fuerza, salió desviado a la izquierda de Rico.

Por último, no me gustaría pasar por el alto el detalle del final del partido, cuando el árbitro decretó que el encuentro se había acabado cuando aún quedaban ocho segundos por cumplir de los dos minutos de tiempo añadido que había decretado. Y lo que es más grave e inexplicable, en el mismo momento en que Achraf, en una gran diagonal y, a pase de Marcelo, se disponía a encarar al meta sevillista.

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