El Real Madrid ha hecho oficial hoy el traspaso de Kiko Casilla al conjunto británico del Leeds United, a las órdenes de Marcelo Bielsa, en una operación que no le reportará nada al Real Madrid, dado que el meta catalán se marcha con la carta de libertad bajo el brazo.
El anuncio del traspaso se ha llevado a cabo por medio de un escueto comunicado hecho público en la web del club y en las redes sociales, donde el Real Madrid, además, ha agradecido su trabajo con unas sentidas palabras, destacando su “dedicación y profesionalidad”, así como su “comportamiento ejemplar”, en sus dos etapas como jugador en el club blanco.
Casilla y el Real Madrid: Un viaje de ida y vuelta
De esta forma, Casilla abandona por segunda vez el Real Madrid, equipo al que llegó con 14 años procedente del Nastic de Tarragona. Tras varios años por las categorías inferiores del club, llegó por fin al primer equipo en la temporada 2006/2007, con Fabio Capello de entrenador.
Ante la falta de oportunidades, el meta catalán voló rumbo a Barcelona para enrolarse en el Espanyol. Tras unos meses en el Espanyol B, debutó con la primera plantilla del conjunto blanquiazul en enero de 2008, pero debido al buen momento de Kameni, acabó la temporada en el banquillo y sale del club barcelonés cedido rumbo a Andalucía.
La temporada 2008/2009 juega de titular en el Cádiz CF y, después de hacerse con la titularidad, se convierte en pieza fundamental para el ascenso del equipo amarillo a Segunda División, procedente del infierno de la 2ªB.
Sin embargo, las cosas no le funcionaron bien a Casilla en la categoría de plata, teniendo que dejar el club cadista al final de esa temporada por lo que volvió a ser cedido, en esta ocasión al Cartagena, con el que jugó un total de 35 partidos durante la temporada 2010/2011.
Su buena temporada en Cartagena le permitió volver al Espanyol la temporada siguiente, en principio como suplente de Cristian Alvarez pero pronto se hizo con la titularidad y triunfar por todo lo alto.
De hecho, su rendimiento en el Espanyol fue tan bueno que incluso llegó a ser internacional con Vicente Del Bosque, que le convocó tres veces con la Selección Española, con la que debutó en un amistoso ante Alemania en Balaídos en noviembre de 2014.
En julio de 2015, una vez producida la salida de Iker Casillas, ficha por el Real Madrid por seis millones de euros como suplente de Keylor Navas, cumpliendo con una enorme profesionalidad en las oportunidades que tuvo la oportunidad de ponerse bajo los palos.
Desgraciadamente para Casilla, la llegada de Courtois al club el pasado verano acabó por relegarle al puesto de tercer portero y le cerró las puertas para cualquier atisbo de llegar a la titularidad, incluso en los partidos más intrascedentes.
En sus tres temporadas y media en el club blanco, Casilla ha jugado 43 partidos y se lleva un total de tres Champions, tres Mundiales de Clubes, dos Supercopas de Europa, una Liga y una Supercopa de España.
“Siempre llevaré al Real Madrid en mi corazón”
Una vez confirmada su salida del Real Madrid, Kiko Casilla colgó en su cuenta de Twitter una emotiva foto en la que sus ya ex-compañeros le regalaron una camiseta y una carta en la que se despidió de toda la afición con una emotiva carta.
“Después de tres años y medio ha llegado la hora de despedirme de mi casa, de mi EQUIPO, de esa casa a la que llegué siendo un niño y de la que me voy después de vivir momentos inolvidables e irrepetibles, no tan solo por los títulos conseguidos, sino por el cariño que he recibido de todos vosotros.
Agradecer al club la oportunidad que me brindó de poder cumplir todos esos sueños de niño, de poder ganar y disfrutar de todos los títulos conseguidos durante estas casi cuatro temporadas, y de jugar para el mejor club del mundo.
Comienzo un apasionante e ilusionante reto para mí, pero sin duda siempre llevaré al Real Madrid en mi corazón y sobre todo a mis compañeros, a los que sin duda voy a echar de menos y que les deseo los mayores éxitos, que serán los míos también. ¡Hala Madrid!”.
