Después de un largo período de reflexión vuelvo a escribir en esta web sobre la situación actual de nuestro querido equipo, que a día de hoy marcha segundo de la clasificación liguera solo por detrás del Villarreal, habiendo ganado 4 partidos y ha empatado 3 en Liga y siendo líder de su grupo en Europa empatado a puntos con el PSG con quien nos jugaremos el primer puesto del grupo, pues hasta ahora tanto nosotros como los parisinos hemos ganado los 2 partidos que hemos disputado en Champions, asimismo el equipo ha marcado 15 goles en Liga y ha encajado 2 y en Europa ha marcado 6 goles y no ha encajado ninguno.
Dichas cifras no suenan nada mal para estar en octubre, pero si observamos la histeria que rodea al club parece que estamos cerca de los puestos descenso, las críticas a Benítez se multiplican desde muchos ámbitos incluidos algunos jugadores y algunos piden ya su cabeza, a pesar de estar la temporada recién comenzada, pero luego se quejarán de que no se puede ganar nada sin confiar en un proyecto a largo plazo.
Sinceramente, Benítez no era ni de lejos mi entrenador favorito para capitanear la era post-Ancelotti y soy de la opinión de que ha llegado más por su buena relación con José Ángel Sánchez que por sus méritos recientes, pero opino que una vez que está aquí hay que darle la oportunidad de triunfar con su estilo, porque nadie que haya seguido en los últimos años el estilo de los equipos de Benítez se sorprenderá de la imagen que está dando el equipo en este comienzo de temporada. De momento, los resultados le están acompañando, porque vamos por delante de nuestros principales competidores Barça y Atleti y en Champions somos primeros de grupo, empatados a puntos con el PSG.
Nadie discute que Benítez haya cometido errores tanto en las alineaciones (por ejemplo, no sacando de titular a James en Gijón) como en los cambios (esa ya habitual sustitución de Benzema por un centrocampista), pero las campañas contra el técnico madrileño se han sucedido, y lo de menos empieza a ser el motivo. La primera campaña contra él la desataron los medios porque Benítez no decía rotundamente en ruedas de prensa que Cristiano es el mejor jugador que ha entrenado a lo largo de su carrera, cuando el entrenador dijo que Cristiano es imprescindible, ha salido nuestro lenguaraz capitán a decir que no cree que en el fútbol haya nadie insustituible, Ramos tendría credibilidad en su indirecta a su entrenador actual si hubiera criticado igual la teoría de los innegociables que acuñó Ancelotti la temporada pasada, pero entonces Canelita calló porque estaba satisfecho con la permisividad de Carletto.
También se ha filtrado el descontento de algunos jugadores con sus pocos minutos, como ocurrió con Jesé Rodríguez por el que los periogolfos dieron el coñazo en cada declaración de Benítez hasta que lo puso de titular contra el Málaga, otros jugadores han ido de cara y han expresado públicamente sus quejas como hizo Benzema tras el derbi, mientras que después de golear 5-0 al Betis algunos criticaron al entrenador por alinear un once con Sergio Ramos como único español, hemos llegado al punto que da igual que ganemos, empatemos o perdamos que hay que dar al entrenador igualmente, y si no hay motivos evidentes se buscan.
Al igual que las lesiones de la pasada temporada que tanto lastraron al equipo en los momentos clave (James y Modric) no me parece que fuesen culpa de Ancelotti, tampoco considero que las numerosas lesiones que llevamos a estas alturas de año sean culpa de Benítez, pues si las analizamos una a una, 2 de ellas se produjo durante el anterior parón de selecciones (James y Danilo), en ese sentido la historia se repite y volvemos a perder para 2 meses a un jugador básico para el equipo en un partido que al Real Madrid ni le va ni viene (el año pasado fue Modric y este año fue James), otras 3 lesiones han sido causadas por entradas fuertes que han acabado lesionando a nuestros jugadores (Ramos, Varane y Carvajal) y sólo 3 lesiones de las 8 que ha sufrido el equipo hasta ahora han sido de naturaleza muscular (Bale, Pepe y Benzema durante la pretemporada), aún con todas esas bajas de jugadores de importancia capital en nuestro equipo vamos segundos en España y colíderes en la Champions, y aún así le llueven palos a Benítez.
Todo ello me hace concluir, que la mayoría de las críticas que recibe no están basadas en lo futbolístico, pues si algo se ha demostrado hasta ahora es que le van a apalear haga lo que haga el caso Cristiano es el mejor ejemplo (si no aclara explícitamente que es el mejor jugador que ha entrenado en su carrera le llueven palos de los periodistas y si lo dice es nuestro capitán el que le ahorra el trabajo a los periogolfos).
Dicho esto, si yo hubiera sido entrenador del Real Madrid jamás hubiera acudido a 2 radios distintas tras un derbi, sabiendo que el único interés de los periodistas es meter mierda, como demostró Joseba Larrañaga cuando su primera pregunta de la entrevista la dirigió a si Benítez se sentía contento por el fatal arranque que ha cuajado el Chelsea de Mourinho este inicio de temporada, si hubiera seguido su Ley del Silencio y se hubiera negado a responder las preguntas de esta gentuza, nos habríamos ahorrado el sainete del actual capitán disparando contra su entrenador por reprocharle su tremendo error que no nos costó el empate del Atleti en la primera parte por intercesión milagrosa de Keylor Navas parando su segundo penalti de la temporada, una vez más nuestro capitán ha demostrado que el pundonor malentendido solo perjudica al equipo, y encima si después de pifiarla esperas agradecimiento por jugar infiltrado en vez de avergonzarte por la pifia cometida. Pero la actitud chulesca de Sergio Ramos, que le hace creerse por encima del mal perdura en el tiempo, por más que pasan entrenadores mientras sus palmeros le aplauden como se salta el principio de autoridad de toda empresa, mientras ellos no se atreven a toserle a su jefe. Así nos va.
Esperemos que se calme esa tensión, que veamos que el equipo no está tan mal como algunos nos cuentan y sobre todo que se deje de incendiar el ambiente del club desde dentro, porque para enmierdar ya están los de la fuera, que hay muchos periodistas y de muy distinto signo preparados con la escopeta cargada para disparar contra todo lo que se mueva.
