FC Barcelona 4-0 Real Madrid Fem.: “Todavía a años-luz”
El Real Madrid Femenino tampoco pudo con el Barça en el sexto Clásico de una temporada, en la que las de Alberto Toril llegaron hasta donde pudieron, y en la que se volvió a evidenciar la sideral distancia que, a diía de hoy, aún existe con respecto a las azulgranas.
Había cierta expectación con la posibilidad de una sorpresa en el Estadio Santo Domingo de Alcorcón por el posible bajón moral del Barça, tras el durísimo varapalo recibido el pasado sábado con su estrepitosa derrota en la Final de la Champions Femenina ante el Olympique de Lyon, pero no pudo ser. De ninguna manera.
El Real Madrid Femenino,con un equipo tremendamente cansado tras una durísima temporada, fue triturado sin paliativos, en un partido en el que el resultado, a pesar de la dura derrota, pudo ser incluso peor y las de Toril no dieron la sensación de poder estar a la altura en ningún momento.
Antes del primer cuarto de hora, Misa ya tuvo que sacar los guantes a pasear ante Mariona, en una gran parada a bocajarro, y Alexia Putellas había estrellado un remate en el palo. Y no hubo que esperar mucho más, a los 19 minutos Lieke Martens batió a la meta canaria con un buen remate cruzado desde el área pequeña, tras una gran asistencia de Alexia.
Con el Madrid a merced de las azulgranas, sólo Athenea tuvo alguna opción de empatar a los 30 minutos de la primera mitad, pero su disparo se marchó por encima del larguero, en la única oportunidad madridista durante todo este período.
Tras la reanudación, el Barça sentenció enseguida la eliminatoria, con dos goles casi consecutivos de Aitana Bonmatí, después de una gran jugada de Oshoana (muy mal defendida, por cierto, por las chicas de Toril) y de Mariona, a la salida de un córner.
Y ahí se acabó todo. Buscando otra nueva goleada y con el viento tremendamente favorable, el Barça se volcó sobre la meta de Misa, que tuvo que lucirse en varias ocasiones, pero que no pudo evitar que Oshoala, en el minuto 75, anotase el cuarto después de una espectacular galopada por la banda derecha.
Sólo al final, Nahikari pudo haber maquillado levemente el marcador pero su cabezazo se marchó rozando la cruceta, dando por terminada de la peor forma posible una temporada que, pese a todo, ha acabado con buena nota y con el objetivo de la clasificación para la Champions, logrado.